Este impresionante templo es una síntesis de todo el lenguaje hermético del genial arquitecto catalán, que aunque algunos opinan que tan solo era un simbolista, yo estoy convencida de que su conocimiento iba más allá. Una vez dijo, "La inteligencia del hombre sólo puede expresarse en el plano y en dos dimensiones, la inteligencia angélica es en tres dimensiones y se despliega directamente por el espacio"
Personalmente
creo que la Sagrada Familia, de Antoni Gaudí, es una de las obras
arquitectónicas más emblemáticas de Barcelona y para mí, una de las
mejores que hizo este arquitecto catalán, nacido en la ciudad de Reus, el 25 de junio de 1852.
Gaudí empezó su construcción en 1883, cuando contaba tan sólo con 31 años, y fue su gran obra maestra.
Muchos
no saben que el proyecto de construcción de este monumento fue de José
María Bocabella, que en 1881 había recogido suficiente dinero como para
comprar un gran solar que había en aquella zona del Eixample, en el que
quería construir un templo dedicado a San José y a la Sagrada Familia, y
que inicialmente este proyecto fue adjudicado a Francisco de Paula del
Villar, arquitecto diocesano que colocó la primera piedra en el día de
San José en 1882 con el que José María tuvo rápidas desaveniencias,
cediendo el proyecto a Gaudí que lo aceptó en 1883. 
En
un principio el proyecto de esta catedral empezó con unos bocetos de
estilo neogótico, un estilo que Gaudí consideraba imperfecto.
Pero debido a la gran imaginación de que disponía Gaudí y a su capacidad de improvisación, fue ejecutando su gran obra día a día según le iba viniendo la inspiración, basada siempre en las leyes de la naturaleza.
De ahi surgió en parte su idea de edificar altas torres cónicas que debido a la profusión de ventanas que tienen, le dan ese particular aspecto helicoidal.
Una vez que el templo esté terminado, constará de 18 torres con 48 campanas en total que se dispondran sobre las tres fachadas de la catedral, cuatro para cada una de ellas, y seis para formar una cúpula con la torre central en el medio.
Pero debido a la gran imaginación de que disponía Gaudí y a su capacidad de improvisación, fue ejecutando su gran obra día a día según le iba viniendo la inspiración, basada siempre en las leyes de la naturaleza. De ahi surgió en parte su idea de edificar altas torres cónicas que debido a la profusión de ventanas que tienen, le dan ese particular aspecto helicoidal.
Una vez que el templo esté terminado, constará de 18 torres con 48 campanas en total que se dispondran sobre las tres fachadas de la catedral, cuatro para cada una de ellas, y seis para formar una cúpula con la torre central en el medio.
A
la muerte de Gaudí en 1926 quedaron algunos planos y un diseño en yeso
que fue bastante deteriorado durante la guerra civil. A partir de estos,
se ha seguido la construcción de este monumento por diversos
arquitectos y escultores, que le han dado su toque personal y
particular, a mi entender, muy diferente a lo que Gaudí tenía en mente y
que en algunos casos, distorsiona mucho con el resto de la
construcción, como las figuras de cortes rectos de Josep María Subirachs
incluidas en la fachada de la Pasión.
La
arquitectura de su interior es digna de ver, por su originalidad y
luminosidad. Sus estructuras siguen estando basadas en formas naturales,
como las de los árboles. Se dice que entrar en esta catedral es como entrar en un gran bosque de piedra.
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